Jueves, 27 de enero.
Llegó el día jueves y con
él, los ánimos de seguir aprendiendo a distancia, sobre la máquina poderosa de
nuestro cuerpo.
Iniciemos realizando la lectura del día,
para recrearnos leyendo y poniendo a volar nuestra imaginación, en ésta
oportunidad, te presento un diálogo teatral corto:
El patio
Patio trasero de un chalet de la
periferia. En escena ANA, FRAN y un niño de unos diez años. Es mediodía.
Ana. (Mira al niño)
¡Míralo!, ayer hizo de vaquero y hoy de astronauta.
Fran. Mañana será marinero,
¡seguro!
Ana. ¡Me encanta ver a
David feliz! Espero que nunca deje de jugar.
Fran. Lo hará algún día; pero
por ahora le quedan muchos juguetes en este patio.
Acto II
Mismo patio trasero. Han pasado
doce años. En escena ANA y FRAN sentados en un banco de madera, mucho más
viejos y cansados. Está atardeciendo.
Ana. (Con voz
entrecortada) Extraño a David. Desde que maduró no ha vuelto a vernos.
Fran. ¡Cariño!, ahora es adulto.
Tiene responsabilidades.
Ana. Debería regresar y
volver a jugar, aunque fuera por un día.
Fran. Es complicado. Los
adultos tienen poco tiempo para esas cosas.
Ana. Lo sé, pero antes
creía en lo imposible.
Fran. ¡Cierto!; David debería
visitar el patio trasero más a menudo.
Escribe en tu cuaderno de Naturales:
Título de la lectura.
¿Cuál fue el valor con el que
inició la lectura?
¿Qué sucedió con ese niño?
¿Cómo se sentían esos viejitos?
Según tu parecer:
¿Crees que hay edad para dejar
de jugar?
Menciona algunas acciones que
observas en tus padres, tíos y abuelos que los mantiene joviales.
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